Las reglas del juego son el juego.
Todas las certezas tienen una duda sobre su conciencia.
El buen artista sólo a sí mismo se tañe. (Del Libro de Horas)
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La mímesis es la Némesis.
El camino más certero es ir atravesando caminos.
Si la llama no oscila, o está apagado el viento o está apagada la llama.
Un camarada y una trinchera: eso es todo lo que se necesita. (Del Cuaderno negro)
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466.- Si has encendido una luz, has merecido la
vida.
467.- Como las plantas del desierto, la amistad puede esperar años y florecer
con una sola gota.
468.- No malgastes lo infinito.
469.- Se desprecia la sabiduría porque es el único pago de sí misma.
471.- Hay palabras sin sentido, pero no hay sentido sin palabras.
472.- El amor es gratuito. Si crees que te lo deben, no te lo deben.
473.- En medio del océano, toda la orilla es puerto.
474.- Temeraria actividad: darle cuerda a los relojes.
475.- Inventamos los recuerdos, claro, sólo faltaría que los hubiésemos
vivido.
477.- Sólo los actos irrevocables son actos.
478.- Los títeres son ciegos para las cuerdas que los manejan.
479.- Cuando el armero afila la daga, para que mate la afila. (Del Cuaderno negro
III)